En el último año, una serie de robos a locales gastronómicos de Castelar Norte e Ituzaingó han encendido la alarma en comerciantes y empleados del sector. Se sospecha que los mismos delincuentes operan con una metodología similar, a la estupefacción de la Policía y la justicia, que parecen atrapadas en una letanía de inacción.
La secuencia que se repite es siempre la misma: atacan durante el cierre, armados y amenazando al personal. Las víctimas son forzadas a tirarse al suelo y, con precintos, les atan las manos por detrás. Les preguntan insistentemente por el dinero, revisan cualquier rincón en busca de objetos de valor y, tras obtener lo que desean, se marchan sin dejar heridos. En menos de diez minutos, el golpe está consumado.
Una saga delictiva que se extiende por más de un año
Desde junio de 2024 hasta la semana pasada, esta serie de asaltos ha golpeado distintos comercios de alimentos, tanto para consumir en el lugar como para llevar. A pesar de que hay denuncias, los ladrones continúan con su accionar, y una serie de videos afilados por Primer Plano Online sugiere que se trata, efectivamente, de los mismos individuos.
Los locales afectados incluyen varios emblemas de la zona: El Mercader, en la Avenida Sarmiento al 2400; la pizzería Donsion, en Santa Rosa y Arredondo; el bar temático Don Elvis Diner, en San Nicolás al 800, y la pizzería Bravo, en Carlos Casares al 1200.
Pero su campo de acción no se limita a Castelar. También han atacado heladerías como Grido, en pleno centro de Ituzaingó, y Iceland, que recientemente se mudó a la Avenida Santa Rosa al 1500.
La voz de un comerciante damnificado
“No debe ser tan difícil atraparlos. Solo hay que tomar la decisión de investigar y darse cuenta de que son siempre los mismos”, reflexionó un comerciante asaltado que prefirió mantener el anonimato. Las cámaras de seguridad, que proliferan en los locales, parecen no amedrentarlos; en varios casos han actuado a cara descubierta, y en otros, con barbijos como una simple cortina de humo.
Un detalle curioso que ha salido a la luz: cada uno de estos hechos es investigado por una Fiscalía diferente, dependiendo del día y la hora en que se cometió el delito. Hasta el momento de escribir estas líneas, la justicia considera estos robos casos aislados. Está claro que hay muchas más historias detrás de cada asalto. Tal vez, tras compilar los videos que se han acumulado, las autoridades se decidan a unificar estos casos en un único expediente, finalmente.
“Ya van a salir: cuenten hasta 100”: cuarto robo a una heladería de Ituzaingó, con empleadas atadas y boca abajo.
