Domingo de elecciones en Ituzaingó. Afuera de la Escuela Primaria N° 19, en la esquina de Patagonia y Tel Aviv, la fila avanzaba mansa. Adentro, además de boletas y boletas, había un dato frío: la Policía esperaba a uno de los sospechosos de un asalto brutal cometido semanas atrás. Llegó, votó y, cuando salió, lo esposaron. Su hermano cayó horas después, en la vereda de su casa, arriba de una moto. La escena cerró una pesquisa que había arrancado el 23 de agosto, con una adolescente arrastrada por el asfalto en el barrio Iparraguirre.
Puntos clave
- Una adolescente fue asaltada el 23 de agosto en Pacheco y Aquino, Iparraguirre: la arrastraron por el piso y le robaron el celular.
- La DDI Morón identificó a dos hermanos como presuntos autores a partir de cámaras de seguridad, bajo la órbita de la UFI N° 2 de Ituzaingó.
- El menor de los hermanos, de 25 años, fue detenido tras votar en la Escuela Primaria N° 19.
- El otro fue arrestado más tarde, en Anchorena y Grecia, cuando estaba sobre una motocicleta.
- Ambos quedaron a disposición de la fiscalía por robo agravado por el uso de arma y lesiones leves.
La agresión en Iparraguirre
Fue a la altura de Pacheco y Aquino, una esquina de tránsito barrial, donde el 23 de agosto una adolescente caminaba por la vereda. Dos hombres la abordaron —uno de ellos armado, según la investigación— para sacarle lo que llevaba. La resistencia fue breve y dura: la tiraron, la arrastraron por el asfalto y le pegaron hasta quitarle el celular. Se fueron rápido, dejándola herida y con el miedo pegado a la ropa. En Ituzaingó, como en tantos barrios del Oeste, esas marcas quedan a la vista.
Las cámaras y la espera
Con un relevamiento de cámaras municipales y privadas, la DDI Morón reconstruyó trayectos y rasgos. La UFI N° 2 de Ituzaingó dispuso las diligencias y la vigilancia. El operativo clave se montó el domingo 26 de octubre en la Primaria 19: el dato era que ambos hermanos debían presentarse a votar. El menor, de 25 años, entró, cumplió con el trámite y al salir lo interceptaron. Le secuestraron un teléfono, que ahora será peritado.
El segundo arresto
El otro sospechoso no apareció por la escuela. Entonces, los agentes fueron a Anchorena y Grecia. Lo encontraron en la vereda, a bordo de una moto. Ahí mismo lo detuvieron. Sin sirenas largas ni corridas: un procedimiento corto, de barrio, con vecinos mirando desde el umbral.
La causa y lo que viene
Los dos quedaron a disposición de la fiscalía para ser indagados por robo agravado por el uso de arma y lesiones leves. La calificación refleja lo que cuenta el expediente: violencia con arma y una víctima menor de edad. En tribunales de Morón, como suele pasar, ahora hablarán los papeles: pericias del celular, lectura fina de las cámaras y el testimonio de la joven. La calle, mientras tanto, sigue su ritmo: la escuela vuelve a clases y las esquinas vuelven a ser esquinas, hasta el próximo operativo con final anunciado.
